Le diría que la primera vez que la mire a los ojos ya estaba perdido y que ella me había ganado la segunda vez que me hablo, aunque para ella eso tuviera poco sabor a triunfo…
Y Que paso?- preguntó Vane luego de oir mi relato
-Nada. El colectivo estaba lleno de gente. No era el momento ni el lugar. Hubiera sido un escandalo- respondi tratando de justificar mi cobardia. Sabia que Vane no era como yo pero senti que tenia que hablar con ella. Y ella lo sabia el dia anterior cuando me llamo y arreglamos vernos en ese bar loser de Ciudad de la Paz, donde soliamos juntarnos a hablar, a tomar algo y-yo por lo menos- a ver pasar la vida sin muchas esperanzas, perdidos en conversaciones que no llevaban a ningun lado y que tal vez por eso eran tan interesantes: porque no conociamos el fin de las cosas. Aquel viernes yo habia llegado un rato antes de lo pactado, un poco por ansiedad, otro poco porque no tenia nada mejor que hacer que esperarla. Cuando Vane llego, llego sonriendo,como acostumbraba andar por la vida: mi amargura nunca hizo mella en su alegria.
-No podes seguir asi...-dijo mientras buscaba freneticamente cigarrillos en su cartera.
-Asi como?- dije, levantando mi patetica cara con los ojos semi abiertos, con el miedo propio de un fusilado o de alguien que ve directamente al sol.
-Asi...con esa cara de infeliz...- dijo con una honestidad brutal. La mire sorprendido. Los dos reimos. Despues de todo, supongo que yo me habia ofrecido en sacrificio a la sinceridad de Vane,a esa forma extraña de quererme que tiene, que no le permite mentirme, ni siquiera cuando mas lo necesito. Maldita Vane y su etica kantiana.
-No podes ser tan maricon... No se que estas esperando- siguio, ya sin miedo a herirme y mientras se esforzaba en hacer funcionar un encendedor que llevaba varios meses de batallas y que ya había perdido la guerra contra la utilidad. Nos quedamos en silencio, a mi me dolía saber que tenia razón. A ella le molestaba ese encendedor que no era servil a sus vicios. – ya vengo- dijo y se levanto a buscar fuego. La vi perderse en la barra.
Me quede pensando en Dolores: ¿que estaría haciendo ella esa misma noche? Me reí con culpa por mis ridículos sentimientos que se mezclaban con esa sensacion de impotencia tan comun a los amantes no correspondidos. La voz de mi conciencia tambien se mofaba de mi:" vos pensando en ella y ella probablemente este con alguien en este mismo momento..." Mi parte racional y pesimista me estaba saboteando. Y no bastando con esas crueles palabras me regalaba imagenes mas dolorosas: en mis pensamientos Dolores bailaba, Dolores era seducida por un extraño que vertia en sus oidos las mas dulces promesas de amor que pueden darse entre dos desconocidos y Dolores, ya vencida, se subia al auto del extraño, para perderse sin destino en las sabanas berretas de algun hotel de mala muerte.
A lo lejos la vi a Vane acercándose, satisfecha por llevar un cigarrillo que ardía en su boca.
-Te parece que para tener facebook es necesario ser lindo?- preguntó mientras se sentaba.
-Eh? no se...A que viene la pregunta?-
. Pasa que cuando estaba en la barra, vi que en la escalera habia un grupo de chicos y chicas sacandose fotos...Pense que esas fotos tenian destino de facebook
. A veces pareciera que la gente ya solo sale para publicarla en facebook- Dije con un poco de amargura.
-Si...Bueno, a lo que voy es que esos chicos, los de las fotos, no eran muy agraciados, ja...Y pense si era necesario ser lindo para tener facebook
-No, no...Tal vez tener una autoestima a prueba de balas sea la condicion. Yo creo que los feos con facebook justifican a los que no sabemos escribir y tenemos blog. Pertenecemos a sindicatos amigos. Los feos y los tontos queremos los mismos derechos que los lindos y los inteligentes.Yo tengo una membresia doble, en mi condicion de feo(aunque sin facebook) y de idiota, ja.
Volvimos a reir. Pero despues de las risas nos quedamos en silencio. Supongo que fue un momento incomodo del que Vane trato de escapar cuando pregunto:
-En que pensas?
-En que soy un idiota
-Bueno, pero a parte de eso...
- Me molesta la idea de no saber que esta haciendo ella en este momento...Es probable que ella ahora, viernes a la noche, ande con cualquiera. Lo peor es que yo no puedo hacer nada por evitarlo-dije bajando la cabeza. Vane se quedo callada. De alguna manera ella tambien pensaba lo mismo que yo. Su silencio fue una estocada mas, confirmacion de todas mis paranoias.
-Yo la conozco, no es una chica tonta, no es de la que se cree cualquiera...Es como esa cancion de los Redondos... Esa que dice "de esa miel no comen las hormigas..."- dijo Vane tratando de apaciguar mi rostro- Si tanto te duele hace algo, no se... Trata de conquistarla
Me dio ternura que dijera "conquistarla".
-Mañana se cumplen 22 años desde la ultima vez que alguien utilizo el verbo conquistar en una oracion
-No seas tarado... En serio te estoy diciendo...Sos bueno para chamuyar?.
-Vane, ya me conoces...
-No conozco esa faceta tuya... Nunca intentaste conquistarme...- y sus ojitos se apartaron de mi mirada.
-Soy pesimo... Siempre me senti extraño en esa situacion, en la de la conquista. Para mi siempre fue como una entrevista de trabajo: por los nervios, por la exageracion de cualidades, por la necesidad de impresionar... y en mi caso ambas situaciones terminan con la misma frase: "no, te preocupes, deja que yo te llamo..."
-Ja...Tenes que hacer algo. Tenes que decirle lo que sentis. Hablando se libera la gente. Es la base del psicoanalisis- y mientras decia eso buscaba sus cigarrillos para encontrarlos y acordarse de que no tenia encendedor. Una cancion sonaba a lo lejos, pero yo, perdido en mis pesadillas, la habia ignorado. Era Black, de Pearl Jam. Y justo volvi en si en la parte en la que Eddie Vedder se desgarra cantando: "I know someday you'll have a beautiful life, I know you'll be a sun in somebody else's sky, but why Why, why can't it be, can't it be mine?" Puta madre. En ese momento quise mas que nunca-mas que en todos los años de mi adolescencia en los que Pearl Jam era la banda sonora de tardes grises y habitaciones oscuras- a Eddie Vedder.
-Y que hago si me rechaza?-
-Nada...Salir de la melancolia- dijo mientras se levantaba para ir a buscar fuego.
Maldita Vane.
salir de la melancolía
ResponderEliminarSalir.
ResponderEliminarQue tiene su contracara inevitable: entrar en otro sitio